miércoles, 25 de mayo de 2016

Y si nos mordemos el dolor es dulce...

 Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano por tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.

     Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua.

Te sigo eligiendo,,, cierro los ojos y te veo al lado mio, cierro los ojos y te veo en un abrazo contenedor, cierro los ojos y te siento durmiendo... cuando abro los ojos y veo que no es cierto... qué difícil. Fue mía la elección de una distancia, pero sabes y conoces, la tortura interna que me genero preguntándome si todo esto es necesario, si todo esto es correcto, si todo esto vale. Si vale lo que siento o vale el miedo a repetir los hechos.
Te conozco amor, se que abajo de ese enojo también tenes tus propias preguntas y tu propia angustia, espero que de todo lo que aprendimos, espero que te acuerdes que calmar dolores con enojo nunca funcionó.
Se que escribo sola en una página de internet, oculta entre millones, que nadie lee, que vos tampoco lees. Por eso me siento en libertad de decirte que te amo, y que todo el tiempo lo hago, todo el tiempo lo hice, que tengo miedo, o que me pasan cosas que quiero comentártelas. 

Sueño, deseo: mirarte para sonreír y volver a elegir vivir.

Me hace bien caminar por la playa con un mate y tu compañía, es un recuerdo sano que me acaricia, y un deseo que me hace acordar que tenés razón que no estaba todo perdido. Hay que ser paciente nada mas, y entender saludablemente que espacio y que proceso necesita cada persona, que respuestas en el interior de cada uno faltaba buscar para entender mejor como hay que caminar. 
Y si al final nuestra caminata no es juntos,,, mi amor, fue mi mayor placer haber coincidido en esta vida con vos.
Y si al final de tanto es juntos... así va a ser, pero solo para hacernos felices, para eso tenemos que elegirnos. Ya se que me mostraste que tenemos algo real, no estábamos en tiempos iguales, era eso.

Te extraño mucho.








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